Cosas que detesto de las Fiestas
- La fiebre de los regalos.
- "¿Alcanzará para todos con esto?"
- "¡Nos quedamos cortos con las sillas!"
- Los que te saludan como si fueran tus mejores amigos y en realidad no sienten nada.
- Los que viven en una nube de pedos pero te mandan cadenas lacrimógenas hablando del espíritu navideño y boludeces similares.
- Las discusiones para ver cuál fiesta pasás con la familia de ella y cuál con la tuya.
- Los que no creen en nada y aún así festejan Navidad.
- Los que creen en algo pero no tienen ni puta idea de qué se festeja en Navidad.
- Los que festejan Año Nuevo pero el resto del año siguen a rajatabla el calendario de su propia religión.
- Los que comen como si fuera la última vez.
- Los que caen 1 hora antes de la cena para saludarte y terminan amargándote la noche al recordarte (con resentimiento) la suerte que tenés de tener a <insertar familiar cercano> vivo y ellos ya no.
- Los que se ponen en pedo al pedo.
- Los boludos que tiran petardos y terminan con quemaduras de tercer grado en todo el cuerpo porque no saben festejar sin ruido.
- Los boludos que tiran petardos.
- Los que les venden petardos a los boludos que tiran petardos.
- Los
malparidosmal llevados que se deleitan en decirles a los chicos que Papá Noel, El Niño Dios y los Reyes Magos no existen, sólo porque otromalparidomal llevado les cagó la infancia a ellos de la misma forma. - Los amargados "Ebenezer Scrooge" que prefieren quedarse solos en lugar de aceptar una invitación hecha con buena intención.
- Los que te dicen "¡Te deseo que disfrutes mucho!" sin tener ni puta idea de lo que están diciendo.
- Los que ponen la música a todo lo que da.
- Los que se pelean para ver qué música poner a todo lo que da.
- Los que esperan a que el equipo de música quede sin vigilancia para ir y poner la música que ellos quieren... a todo lo que da.
- Los que hacen ostentación con los regalos.
Buena pregunta: las festejo porque todavía tienen cosas que me gustan.
- El cagarme de risa preparando la mesa.
- La charla previa a la cena, comentando las Fiestas de años anteriores.
- El poder estar juntos a pesar de todo.
- El llamado de último momento a ese amigo que hace mil años que no veía pero que siempre está.
- El llamado sorpresa de esa persona que no esperaba que se acuerde de mí.
- La cena juntos, sabiendo que lo importante no es la comida sino cómo se come.
- El esperar las 12 de la noche mirando cómo festejan en otros lugares del mundo.
- La llegada de las 12 y ese abrazo sentido del que no me voy a olvidar nunca más.
- Ese regalito tan sencillo que me hicieron cuando las cosas estaban para la mierda y que para mí fue como si me regalaran un 0 km y que cada vez que me acuerdo me dan ganas de llorar.
- El saber que no viví un año más al pedo.
- El saber que con cuatro pizzas y dos kilos de helado estamos igual o más contentos que los que se desviven por preparar comida para deslumbrar a los demás y después terminan reventados.
- El saber que entre Navidad y el año que arranca, es un poco como nacer de nuevo.
1 comentarios:
Me gustó mucho esta entrada. Es como un resumen de lo que nos pasa a algunos, y que lamentablemente no a todos.
Y no a todos, porque naturalmente no hacen esta clase de autoreflexiones.
Si la Navidad logra provocarte lo que escribís, qué bueno entonces, que exista esta época del año.
Lo celebro.
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